SIEMPRE HE SIDO una lectora voraz: llevo registros de todos los libros que he leído desde 2006 y ya por aquellos tiempos el conteo total de libros leídos me salía de más de 100 al año. Por supuesto, eran libros más finitos y sencillos que los que leo ahora (me interesaban otras cosas, también), y tenía más tiempo libre del que tengo ahora. Pero no dejan de ser cifras de las que estar orgullosa.
Y, sin embargo, desde hace algunos años me cuesta leer tanto como antes. De hecho, hubo un tiempo en el que no leía nada de nada, durante meses (y, además, coincidió con un período en el que también dejé de escribir). Por entonces, conseguía terminar un libro al mes, y con mucho esfuerzo. Nada conseguía engancharme, no terminaba de encontrar nada que me gustara. Y, cuando por fin me decidía a coger un libro, tardaba muchísimo tiempo en acabarlo.
Supongo que has tenido etapas parecidas. ¿Qué se puede hacer en estos casos?